El vino tiene la capacidad de acompañar las estaciones del año, haciendo que cada momento se vuelva aún más especial. Ya sea para calentar una noche fría o refrescar una tarde cálida, el vino puede ser el compañero perfecto.
Aquí te compartimos algunas opciones.
Vinos para Primavera
La primavera es perfecta para disfrutar de vinos más frescos. Variedades como el Sauvignon Blanc y Pinot Grigio destacan por sus notas cítricas y florales, perfectos para platos frescos como ensaladas, mariscos o pescados. Los vinos rosados también ofrecen versatilidad, ideales para acompañar desde tapas hasta platos más elaborados.
Vinos para Verano
En temporada de calor los vinos blancos sin barrica como el Chardonnay o el Albariño son opciones ideales para combatir el calor gracias a su frescura. Un vino rosado bien frío también es una excelente elección para acompañar comidas al aire libre. Además, los espumosos como el Prosecco serán tu mejor aliado para tus tardes de festejo.
Vinos para Otoño e Invierno
Cuando el frío llega, los vinos tintos con cuerpo son la mejor opción para mantener el calor. Variedades como el Cabernet Sauvignon, Syrah y Malbec son perfectas para esta temporada gracias a sus taninos y sabores complejos. Estos vinos se complementan a la perfección con platos a base de carnes rojas y quesos curados.
Ya sea que prefieras un vino ligero para una tarde calurosa o uno con cuerpo para una noche fría, siempre hay un vino perfecto para cada momento del año.
Disfruta del vino y celebra cada estación con una copa en mano.